El espectáculo «Naturaleza Encendida», dedicado a la boda de Carlos V
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«Cuando entramos a Naturaleza Encendida en el Alcázar nos sumergimos sin darnos cuenta, en una aventura donde por medio de la música, las luces, los colores y la propia belleza del lugar reconocemos la historia y la leyenda en el espectáculo llamado “ARRAS. Las imágenes proyectadas en los árboles, en las paredes, en los grutescos, en las puertas, consiguen trasladarnos al mundo fabuloso y onírico de lo que pudo ser ese enlace matrimonial ocurrido hace ahora 500 años.»
Texto: Macarena Carvajal
Fotos: Ana Balbontín
“Naturaleza Encendida”, el espectáculo que desde el 3 de noviembre pasado y hasta el 15 de marzo ilumina cada noche el Alcázar sevillano, está dedicado en su tercera edición a las bodas del emperador Carlos V con Isabel de Portugal. «Arras» es el nombre de esta exhibición de luz, sonido y proyecciones que reinterpreta la Sevilla del siglo XVI convirtiendo el monumento sevillano en un teatro brillante y asombroso que no deja indiferente a nadie. Un viaje poético que se apoya en el arte contemporáneo y se hace posible cada año a través de la colaboración de la Comisión de Patrimonio, el Ayuntamiento de Sevilla y la productora Letsgo.
Si la anterior edición recreaba en el Alcázar la visita del rey Felipe V en 1730, en esta tercera, el foco de interés es la llegada de los novios Carlos V e Isabel de Portugal a Sevilla para celebrar sus bodas. Corría el año 1526, y los novios que eran primos, nunca se habían visto en persona y llevaban ya muchos meses de “papeleo”, llamémosle así, pues se solicitaban dispensas papales unas detrás de otras, para que los esponsales fueran permitidos por la Iglesia. Se daba el caso también de que por cuestiones logísticas y antes de la llegada de los cónyuges a Sevilla, ya se habían celebrado dos bodas por poderes con sus festejos y saraos correspondientes.
La reina entró en Sevilla el día 3 de marzo de 1526 por la puerta de la Macarena. Había salido de Lisboa en noviembre de 1525, parando en ciudades y pueblos que se volcaron con la comitiva, organizando festejos y todo tipo de entretenimientos como justas, danzas y juegos.
Una semana después llegó Carlos al que recibieron en el Monasterio de San Jerónimo. Allí el rey juró los privilegios de la ciudad. La boda estaba prevista para el 10 de marzo. Para tan importante acontecimiento Sevilla quiso tirar la casa por la ventana con la construcción de siete arcos triunfales alzados a lo largo del recorrido de la comitiva nupcial. Con ellos trataban de transmitir al pueblo la imagen del rey como un héroe renacentista, dotado de las principales virtudes de gobierno.
Siguiendo el itinerario, encontramos el primer arco, el de la Macarena, que representaba la Prudencia. Junto a Santa Marina se alzaba la Fortaleza. Frente a la iglesia de San Marcos aparecía la Clemencia. A la altura de Santa Catalina se erigió la Paz y el quinto arco, dedicado a la Justicia se ubicó en San Isidoro. Ya en el Salvador en el arco se representaron las virtudes teologales, Fe Esperanza y Caridad. Y, por último, en las gradas de la Catedral aparecía la Gloria. Tal programa de recibimiento fue ideado por varios canónigos contando con la intervención de grandes pintores de la época como Alejo Fernández y Cristóbal de Morales.
Según la leyenda, Carlos e Isabel al verse por primera vez cayeron locamente enamorados. Tanto es así que el rey decidió adelantar la boda y casarse en privado un día antes de lo previsto en el Salón de la Media Naranja. Cuando entramos a Naturaleza Encendida en el Alcázar y nos sumergimos sin darnos cuenta en la aventura «Arras», por medio de la música, las luces, los colores y la propia belleza del lugar reconocemos la historia y la leyenda.
Las imágenes proyectadas en los árboles, en las paredes, en los grutescos, en las puertas, consiguen trasladarnos al mundo fabuloso y onírico de lo que pudo ser ese enlace matrimonial ocurrido hace ahora 500 años.
El espectáculo y la fuerza del láser unen fantasía y realidad. Cada arco y la virtud que lo sustenta está representado por una fábula imaginada por los reyes en los sueños. Estas fábulas hablan, a través de las luces, de los miedos y las inseguridades que acosaban al rey. Fábula de la serpiente que se aparece mostrando el camino de la Prudencia.
El láser y las luces nos llevan a La Clemencia de la reina vestida de rojo y alimentando a los pobres. Los halos luminosos dibujan a la Fortaleza como un león que recorre el grutesco lento y feroz. El ancla que soñó la reina lo encontramos a través de un túnel de luz y sonido que nos encauza hasta la Fe.
Entre los jardines, se eleva la música que nos va transmitiendo calma y asombro ante el maravilloso espectáculo que se expande por todo el Alcázar. El equipo de Letsgo es el encargado de la puesta en escena de este evento. Esta productora española, de reconocida experiencia en espectáculos innovadores y únicos, además de ser pionera en redefinir el entretenimiento nocturno reúne, para su puesta en escena, a los principales talentos locales e internacionales presentando al público un contenido visual que se vincula estrechamente a la historia y a la identidad de nuestra ciudad.
Es una visita imprescindible. Queda tiempo todavía pero no la dejéis pasar.
«Naturaleza encendida» 2024 en Mujeres del Sur:
https://https://mujeresdelsur.es/naturaleza-encendida/