• INICIO
  • CONTACTO
  • Nav Social Menu

    • Correo electrónico
    • Facebook
cropped-logo-mujeres-rojo
  • Mujeres Hoy
    • Las Mujeres al Día
    • Las Mujeres Denuncian
    • Las Mujeres Recomiendan
  • Quienes Somos
    • Mujeres del Sur
    • Ellas son Así
    • Haberlas haylas
  • Palabra de Mujer
    • Dar la voz
    • Nos Vemos
    • Una fecha por dentro
    • Debate
  • El Machista del Mes

A PIE DE CALLE

Dar la voz· Palabra de Mujer

21 Sep

LEER EN LOS MÁRGENES

«…Porque todos los que callan cualquier acto machista, ríen chistes machistas, justifican una agresión o una discriminación, critican a las mujeres feministas con “qué quieren ahora”, “se están pasando” o “ya somos iguales”, reafirman a los maltratadores.«

Por Paula Gómez Rosado

Siempre me han gustado los márgenes de la historia donde quedan ocultos los flecos de la narrativa oficial y que en muchos casos son noticias de revistas de cotilleos de las que leeríamos por pasar el rato o rechazaríamos por banales. Y sin embargo, nos dan muchas veces la respuesta exacta al discurrir de los hechos conocidos. La historia o narrativa de las grandes gestas, las revoluciones que cambian la historia que nos cuentan los libros, suelen basarse en actos de fe porque a menudo faltan esas actuaciones de personajes secundarios que han sostenido o incluso provocado que los protagonistas se luzcan o borden su papel para recibir el aplauso del público escribiendo su nombre en el papel.

Gisèle Pélicot y la foto de su marido y acusado, Dominique Pélicot

Viene esto al caso del juicio que se está celebrando en Aviñón (Francia) contra Dominique Pelicot y 51 hombres más por la violación, tras la sumisión química sistemática a que éste la sometía, de su esposa Gisèle Pelicot. No eran monstruos desalmados, eran hombres normales, ciudadanos cumplidores que en sus espacios profesionales o personales estaban bien considerados.
El juicio seguirá su curso protocolario, posiblemente tendrán una condena que se atenga a la ley y deje satisfecha a la mayor parte de la sociedad porque resulte ejemplar dada la repercusión mediática del caso, que sabemos, ayuda a la judicatura a hilar fino para que no se cuestionen sus decisiones.

Dibujo del juicio contra Dominique Pèlicot y otros 51 violadores en Carpentras (Vaucluse), Aviñón

En el juicio nadie perderá la corrección en fondo y forma. Los acusados bien aleccionados por sus abogadas y abogados, verbalizarán aquello que pueda ayudarles y se guardarán mucho de decir una impertinencia o utilizar un lenguaje incorrecto o agresivo porque saben lo que se juegan. Sus defensas harán malabares para defender lo indefendible pero desde la máxima corrección política, con el objetivo de conseguir un éxito profesional que se traducirá en aumento de clientes y subida de minutas, al fin y al cabo, es lo que se aprende en todas las profesiones.
Nadie, posiblemente, piense en la víctima con suficiente empatía y comprenda sus sentimientos porque todos son piezas de un engranaje repetido a diario en todas las salas de todos los juzgados del mundo. Cada cual procura hacer bien su papel para que la obra se desarrolle con normalidad y tenga el final esperado.

Juicio caso Pèlicot

Pero en los márgenes en blanco se están escribiendo hechos que nos dicen que esto no acaban con la sentencia. Pongo tres ejemplos:

NADIE DIO LA VOZ DE ALARMA

1- Lo primero que me llama la atención, la primera anotación que leo en el margen, es si no hubo hombres que se negaron, posiblemente sí habría alguno que a lo largo de tantos años, dijese que no. Y, sin embargo, nadie dio la voz de alarma, nadie denunció los hechos. Y con el silencio cómplice permitió que se siguiera victimizando a una mujer. Puede que por temor o cobardía, puede que pensaran en esa falsa creencia de que si era cosa de la pareja, lo que ocurre en un matrimonio se soluciona en casa y los demás no deben meterse. Pero posiblemente, haya mucho de ese extraño acuerdo no escrito de complicidad entre iguales. La famosa “fraternité” de las que estábamos excluidas las mujeres. Sus privilegios y creencias interiorizadas que, generalmente les resultan invisibles, son el sustrato de sus verdaderos valores y actitudes.
Necesitamos que la igualdad real forme parte de lo cotidiano para que nos veamos y tratemos como pares en todas las circunstancias y situaciones.

Cuatro de los 51 hombres acusados de violación en este juicio

NO SON TODOS LOS HOMBRES PERO TODOS SON HOMBRES

2- Inmediatamente han salido hombres defendiéndose, sin que nadie los haya acusado, de que no son todos los hombres. Las redes se llenan de estos mensajes que intentan defenderse o incluso justificar los hechos como en todas las ocasiones en las que una mujer es agredida salvajemente por un hombre.
Es verdad, no son todos los hombres pero todos son hombres y son ellos como colectivo los que deberían cuestionarse qué pasa, por qué pasa y en qué medida son cómplices de lo que pasa para poder erradicarlo.
Porque todos los que callan cualquier acto machista, ríen chistes machista, justifican una agresión o una discriminación, critican a las mujeres feministas con “qué quieren ahora”, “se están pasando” o “ya somos iguales”, reafirman a los maltratadores.

Acusados entrando al juicio

RENUNCIAR A PRIVILEGIOS/ DENUNCIAR LA VIOLENCIA

Por tanto, a esos que no maltratan, a los hombres «buenos» que quieren unas relaciones igualitarias, yo les pido dos cosas:

La primera el autoanálisis personal y colectivo para reconocer sus privilegios y empezar a renunciar a ellos, será un proceso largo y arduo, pero beneficioso para los hombres y las mujeres. Necesitan superar sus privilegios y creencias interiorizadas que son el sustrato de sus verdaderos valores y actitudes, es decir, su mirada y su estar en el mundo están sostenidos sobre unos pilares fuertes y antiguos que son las bases de la sociedad patriarcal y sus desigualdades. Derribarlos no es fácil, pero sí necesario.
Segundo, visibilizar y denunciar todo acto de violencia empezando por los de su círculo cercano, desde los mal llamados micromachismos hasta las agresiones sexuales, físicas, psicólogicas y demás, a la vez que apoyan las acciones de las mujeres o promueven otras los colectivos de hombres en contra de cualquier violencia.

Gisèlle Pélicot con sus hijos, en el juicio contra su marido y 51 violadores más

3- El pasado día 17 de septiembre, al salir uno de los condenados de la sala de vistas acompañado de su abogada, una mujer le dijo:

-«¡Vergüenza!»
El hombre respondió:

-«Si sigues así, acabaré violando a tu madre».
La mujer miró a la abogada y dijo:

-«Me acaba de amenazar con una violación»
A lo que la interpelada respondió:

«Bueno si, pero ella se lo ha buscado un poquito.(1)

Esta segunda anotación al margen es, a mi entender, terrible porque implica que el acusado no asume que ha cometido un delito y ha dañado a otra persona, no teme ni a la justicia ni a la opinión pública ni la actitud de rechazo que puede sufrir de su gente más cercana, ni respeta a sus afectos que sufrirán con estos hechos. Por tanto, se siente legitimado para disponer del cuerpo de las mujeres por sus privilegios y no se arrepiente de la violación cometida. Va a seguir siendo un violador en potencia.
Por otro lado, la actitud de la abogada demuestra que no basta ser mujer para rechazar la violencia de género y trabajar en pos de la igualdad y que siguen existiendo mujeres que aceptan el papel de cancerberas del orden patriarcal lo cual nos hacen aún más daño a todo el colectivo de mujeres. La cultura de la violación se promueve incluso con esas frases aparentemente intrascendentes o incluso buenistas, porque no se puede ser equidistante ante una agresión.

Gisèle Pélicot

Me escandaliza que una profesional demuestre tan poca sensibilidad con la violencia de género. Por tanto, hay que seguir reivindicando formación en igualdad y feminismo como materia obligatoria en todas las profesiones que directa o indirectamente tienen relación con posibles víctimas o victimarios. Creo que debe ser una exigencia que llevemos siempre en la agenda feminista para lanzar a responsables de las políticas de justicia, educación, asuntos sociales y otras.
En resumen: los tres casos que menciono indican que nada va a cambiar con este macro juicio que a todas nos horroriza que nos hace sentir aún más vulnerables, porque Gisèle Pelicot confiaba en quien se mostró como buen hombre, buen marido y buen padre.
Son necesarias medidas que de verdad vayan a la raíz del problema y derrumbe los pilares sobre los que se asienta todavía poderoso el orden patriarcal.

Paula Gómez Rosado es escritora y feminista

(1) Extraído del artículo de María Tapiador en “20minutos” del 18/9/2024

Previous Post: « ¡Y YO CON ESTOS PELOS!
Next Post: PALERMO Y CEFALÚ »

Primary Sidebar

  • Aviso Legal
  • Política de privacidad
  • Política de Cookies

Copyright © 2025 · Web desarrollada por Creamerito

Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios
Ajustes CookiesSaber másACEPTORECHAZAR
Política de cookies

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
Necessary
Siempre activado

Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. These cookies ensure basic functionalities and security features of the website, anonymously.

CookieDuraciónDescripción
cookielawinfo-checbox-analytics11 monthsThis cookie is set by GDPR Cookie Consent plugin. The cookie is used to store the user consent for the cookies in the category "Analytics".
cookielawinfo-checbox-functional11 monthsThe cookie is set by GDPR cookie consent to record the user consent for the cookies in the category "Functional".
cookielawinfo-checbox-others11 monthsThis cookie is set by GDPR Cookie Consent plugin. The cookie is used to store the user consent for the cookies in the category "Other.
cookielawinfo-checkbox-necessary11 monthsThis cookie is set by GDPR Cookie Consent plugin. The cookies is used to store the user consent for the cookies in the category "Necessary".
cookielawinfo-checkbox-performance11 monthsThis cookie is set by GDPR Cookie Consent plugin. The cookie is used to store the user consent for the cookies in the category "Performance".
viewed_cookie_policy11 monthsThe cookie is set by the GDPR Cookie Consent plugin and is used to store whether or not user has consented to the use of cookies. It does not store any personal data.

Functional

Functional cookies help to perform certain functionalities like sharing the content of the website on social media platforms, collect feedbacks, and other third-party features.

Performance

Performance cookies are used to understand and analyze the key performance indexes of the website which helps in delivering a better user experience for the visitors.

Analytics

Analytical cookies are used to understand how visitors interact with the website. These cookies help provide information on metrics the number of visitors, bounce rate, traffic source, etc.

Advertisement

Advertisement cookies are used to provide visitors with relevant ads and marketing campaigns. These cookies track visitors across websites and collect information to provide customized ads.

Others

Other uncategorized cookies are those that are being analyzed and have not been classified into a category as yet.

GUARDAR Y ACEPTAR