PIRUETA ARRIESGA
Por Paula Gómez Rosado
Con el pie levantado para dar otro salto
en medio del vacío camino del futuro
dos palabras aladas me llegan de improviso
y no entiendo el motivo que las trae hasta mí.
Saltan
ágiles
como cuando era niña sin uvas ni confetis
me aparecían vocablos que casi no entendía
para abrirme camino cuando en la noche vieja
los mayores brindaban por un año mejor
y a mí se me antojaban las palabras extrañas
parejas que se unían en mi imaginación
salud lotería
amor suerte.
Son como dos abejas que zumban sin descanso
se me instalan delante y me impiden avanzar
se me queda en el aire una pierna extendida
mientras pierdo el zapato y los dedos se agitan
logran que el otro pie se descalza e imite
y en un desequilibrio de armónicos contrastes
con posturas de danzas sin bajar a la tierra
logro al fin atraparlas y acariciarlas suave
pirueta
arriesgada
mientras declamo lenta hago un giro completo
digo adiós con la mano y alzándome con fuerzas
me pregunto sin miedo la losa que en el suelo
recibirá
mis huellas
en el nuevo almanaque que está a punto de abrirse.
Alargo aún en el aire contorsiones del tronco
porque en la hoja de enero no acabo de encontrar
el día con las letras escritas de mi nombre
leo
releo
hasta que ya no puedo porque el tiempo se agota
caigo en la casilla uno que al recibir mi peso
refleja como un resorte el rótulo esperado
y entonces yo comprendo el reto que supone
dar un salto en el aire y cruzar el vacío
esperando encontrar la vida al otro lado.
Paula Gómez Rosado es escritora y feminista