
NOS DEJAN LAS PERIODISTAS LUCRECIA HEVIA (ElDiario.es) e IARA MANTIÑÁN BÚA (símbolo de la lucha contra el cáncer)

Madrileña de raíces asturianas y afincada en Sevilla, Lucrecia Hevia (1976-2025), «Lucre», llegó a la capital andaluza para fundar la edición local de «20 minutos» en 2003, y aquí se quedó hasta ayer lunes cuando nos abandonó a causa de un cáncer. Deja esposo, dos hijas y la edición andaluza de un periódico digital, ElDiario.es que nació en internet en 2013. Su compañera y amiga, la también periodista María Iglesias, dice de ella que «fue mucho más que una profesional de la información: fue una constructora de espacios de libertad, feminismo, rigor periodístico y compromiso social. Desde muy niña, según sus propias palabras, supo ver ‘el valor de contar las cosas’ y quiso ser periodista. Sus primeros referentes, tal y como ella misma relató en una entrevista el año pasado, fueron Rosa María Calaf y Carmen Sarmiento.»
Pese a su juventud, Lucrecia Hevia recibió numerosos reconocimientos a su trayectoria periodística: en 2022 Premio Luchadoras de UGT, por su defensa de la igualdad desde los medios de comunicación. En 2023, la Asociación de la Prensa de Sevilla le otorgó el Premio de la Comunicación y en 2024, la Delegación del Gobierno en Andalucía le otorgó el Premio Plaza de España por sus valores democráticos.
Desde Mujeres del Sur enviamos un fuerte abrazo a su familia y amistades y lamentamos profundamente que el periodismo andaluz haya perdido a una de sus referentes feministas más valientes y comprometidas.
IARA MANTIÑÁN BÚA

Iara, (A Coruña 1985-2025), es otra periodista joven y comprometida que también fatídicamente nos ha dejado estos días. Estaba ingresada en el Hospital San Carlos de Madrid pero llevaba casi diez años padeciendo un cáncer de los más raros que se conocen: «Condrosacoma extraesquelético mixoide», que afecta sólo a una persona entre un millón. Un murlaco que embistió faltalmente contra la ilusionada Iara y le cortó las alas, pero le permitió también abrir puertas de esperanza a otras personas amenazadas en este funesto ruedo.
La joven periodista fundó la Asociación Sarcomas Grupo Asistencial (Asarga) destinada a templar el desconcierto y la desinformación de las personas afectadas por un cáncer similar al suyo del que nunca antes habían oído hablar. Durante diez años esta periodista que, sin dudarlo, se había plantado en trincheras bélicas de Egipto y Palestina para cubrir guerras inexplicables, utilizó su cruda realidad para impulsar la ilusión en terapias pioneras y en denunciar la carga burocrática del sistema sanitario español, tan autonómicamente fragmentado que permite la existencia de nefastos limbos administrativos según territorios.
Desde la Asociación Asarga que Iara fudó quisieron brindarle una despedida inmersa en el agradecimiento y la desolación:
«Con profunda tristeza, en el día de hoy recibimos la noticia del fallecimiento de Iara Mantiñán Búa, cofundadora y socia de honor de nuestra asociación, que durante más de una década sufrió un sarcoma. Iara que padeció esta enfermedad, recorrió un camino de valentía tenacidad y solidaridad. No solo afrontó su enfermedad con coraje, sino que también utilizó su fuerza y generosidad para visibilizar esta enfermedad y ayudar a las personas que pasamos por una situación semejante, fundando esta asociación ‘ASARGA».’
«Gracias a ella y a ASARGA muchos de nosotros pudimos entrar en contacto con centros especializados, aportándonos información y luz en un camino complicado. En este momento de dolor, expresamos nuestro más sincero pésame a la familia y amistades. Que su legado permanezca vivo, inspirando la mejora del acceso a tratamientos, la investigación y la atención especializada», concluye el comuncado de la presidenta de la entidad.
Desde Mujeres del Sur nos unimos al dolor de la familia y amistades de Iara y compartimos con Asarga el agradecimiento a su personalidad valiente, luchadora y decidida por intentar mejorar la vida de tantas personas invisibilizadas por la incuria sanitaria.
Mujeres del Sur