- LA INICIATIVA, PROMOVIDA POR LA ASOCIACIÓN DE MUJERES «ROSA CHACEL» VE CÓMO SU SUEÑO SE HACE REALIDAD.
- NOMBRES SILENCIADOS O DESCONOCIDOS PASAN A OCUPAR EL PRIMER PLANO EN LAS CALLES DE LA BARRIADA DE JUAN XXIII.
- FIGURAS DESTACADAS COMO LA POLÍTICA FEMINISTA, AMPARO RUBIALES, O LAS ACTIVISTAS MARI ÁNGELES SOLER Y MARÍA REYES JIMÉNEZ FORMARÁN PARTE DEL CALLEJERO SEVILLANO.
Por Miguel Walls
Aunque el Pleno del Ayuntamiento tendrá la última palabra, la Junta Municipal del distrito Cerro-Amate de Sevilla ha aprobado la propuesta de rotulación de nuevas calles con nombre de mujer, entre ellas el de Amparo Rubiales, en el barrio de Juan XXIII. La actual presidenta del PSOE sevillano, exconsejera de la Junta de Andalucía por el PSOE, fue la primera mujer en pertenecer al consejo de gobierno de esta comunidad autónoma.
Activista contra la dictadura de Francisco Franco, promovió en todo momento los valores y principios de la igualdad, lo que le ha valido para ser galardonada con premios como el Meridiana del Instituto Andaluz de la Mujer y el de la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas en el año 2016. Rubiales recibe la propuesta, con agradecimiento y sorpresa:
“Lo de mi calle me gusta y no me lo esperaba. ¡Está bien que te pongan calles en vida! No sé la composición del distrito, pero agradezco mucho la propuesta”.
Fuentes consultadas por Mujeres del Sur consideran que si bien una calle es un honor merecido, por su destacada trayectoria como feminista y política Amaparo Rubiales “debería tener una avenida o una plaza».
Esta idea de la nueva rotulación a nombre de Amparo Rubiales y dos activistas feministas más, Mari Ángeles Soler y María Reyes Jiménez, se suma a la iniciativa ya aprobada el pasado 22 de septiembre por el Pleno del Ayuntamiento de Sevilla que dió luz verde a la nueva denominación de varias vías de la ciudad, entre las que destaca la profunda remodelación a la que será sometido el callejero de la barriada de Juan XXIII. La iniciativa, planteada por la Asociación de Mujeres Rosa Chacel, supondrá un paso más en la visibilidad y la puesta en valor de la labor de numerosas mujeres, así como su aportación y avance en materia de derechos sociales.
Las nuevas nomenclaturas que modificarán en su totalidad la titulación de las calles del barrio de Juan XXIII seguirán una estructuración dividida en cuatro fases. Así, nombres de activistas como Rosa Chacel, cantaoras como La Niña de la Puebla y personalidades del mundo de la cultura como Concha Lagos, Alicia de Larrocha, Josefa Limones, Nieves López Pastor, Carmen Martel, Viniegra, Elena Martín Vivaldi, Elena Maseras Ribera, Reposo Neble Balbuena, Isabel Ovín Camps y otras treinta figuras femeninas más conformarán el callejero urbano de esta zona de Sevilla por etapas.
EL CAMINO EMPIEZA EN LOS BARRIOS
María Reyes Jiménez, de la Asociación de Mujeres Ocio y Salud y Mari Ángeles Soler, de la Asociación Rosa Chacel tendrán también calles en el barrio. Soler, la promotora de la iniciativa, nació en Triana en los años 40 del siglo pasado. Fue nombrada Cerreña Adoptiva en la decimoctava edición de los Premios Cerro del Águila Siglo XXI por su contribución a este barrio a través de numerosas fundaciones de organizaciones y la presidencia de diversas entidades. Resalta sobremanera su colaboración en la Federación de Asociaciones de Mujeres del distrito Cerro-Amate, donde el trabajo social ha vertebrado el tronco principal de su vida. De esta manera, el consistorio reconoce este esfuerzo con el nombre de una calle para ella:
“Llevo más de treinta años en el mundo del movimiento y sentí vergüenza cuando me dijeron que una de las calles iba a llevar mi nombre”, comenta Mari Ángeles Soler. “Fue muy sorprendente, no me podía ni imaginar. Nunca he hecho nada a cambio, solo porque quiero, por mis valores, porque creo que es necesario y porque así lo siento”, explica la activista.
Soler cree que el camino empieza en los barrios. De ahí la importancia de crear una sociedad igualitaria a partir del movimiento civil entre vecinos. “La democracia se queda coja si más de la mitad de la sociedad no participa”, sentencia Mari Ángeles. “La mejora sociocultural y política a través de la fundación de asociaciones de mujeres en aquellas zonas en las que los poderes públicos no llegaban ha sido fundamental para el crecimiento de la población”, explica.
Mención especial merece el distrito Cerro-Amate y todos los barrios que lo componen. Esta zona sudeste de Sevilla presenta un fuerte protagonismo del movimiento asociativo. En cada sector existe una asociación de mujeres, algo que no sucede de forma habitual en otros puntos de la ciudad. Por ello, Mari Ángeles Soler también resalta el papel que tuvieron los centros de adultos en la década de los años 80. “Con estos lugares se consiguió dar formación a muchas mujeres de los barrios. Mejoraron sus conocimientos, su calidad de vida en el ámbito de la salud y eso fue un gran logro”, explica la cerreña adoptiva.
Con todo ello, cerca de cuarenta mujeres protagonizarán una reforma del nomenclátor de la ciudad en el distrito Cerro-Amate. Mujeres que, en algunos de los casos, han formado parte de la historia de Sevilla y de sus barrios. Un reconocimiento a la altura de las circunstancias y que sonará con mucha más fuerza de ahora en adelante en las voces de los vecinos que pasean por las avenidas y las plazas de Juan XXIII. Son las mismas calles, pero con nombre de mujer.