Estamos ante un “grave atentado contra las mujeres”, según el Fórum de Política Feminista. Y es que la ultraderecha de Vox ha conseguido por fin evitar un avance en las políticas de Igualdad de la Junta. Con los votos del PP y Ciudadanos, (conscientes de que la iniciativa parlamentaria contravenía la propia Ley andaluza en materia de Igualdad), Vox logró que saliera adelante esta pasada semana una moción que insta al ejecutivo andaluz a poner freno al lenguaje inclusivo en los libros de texto. Se aprovechaba así esta fuerza política de la necesidad imperiosa de populares y naranjas de recuperar el equilibrio mayoritario de la derecha frente a PSOE y Adelante Andalucía.
Un equilibrio convertido en inestable desde la crisis de los inmigrantes de Ceuta, al cumplir la Junta, presidida por Juan M. Moreno Bonilla (PP), los requerimientos internacionales en materia de emigración (no se puede devolver a menores a sus países de origen si no son requeridos por su familia), y aceptar acoger en Andalucía a once de ellos.
A Vox le faltó tiempo para hacer casus belli de esta decisión -que choca con su ideario contrario a la emigración irregular– y no dudó en dejar en minoría en el Parlamento a los partidos que gobiernan la Junta, PP y Ciudadanos, ante la aprobación de una de las leyes más importantes para ambos como es la Ley de Impulso a la Sostenibilidad para el Territorio en Andalucía (LISTA), la primera de este Gobierno. En La Junta sabían que de seguir ese derrotero el gobierno perdería todas las votaciones por lo que no han dudado en trapichear con los intereses de las mujeres de los que reniega Vox, para atraerse sus votos.
La torticera moción exige a la Junta “impulsar la supervisión de los libros de texto y los materiales complementarios con el objeto de eliminar el llamado ‘lenguaje inclusivo’, que suponga desdoblamiento de términos masculinos y femeninos, de todos los libros de texto oficiales publicados en la Comunidad Autónoma de Andalucía».
También pretende «garantizar que el lenguaje empleado en los libros de texto y los materiales didácticos complementarios supervisados por la Junta de Andalucía se ajuste escrupulosamente a las reglas lingüísticas establecidas por la Real Academia Española».
Este paso atrás en el recorrido de la Igualdad en Andalucía fue denunciado en la cámara por la diputada socialista Soledad Pérez, y por la diputada de Adelante, Ana Naranjo, quienes recordaron que el lenguaje inclusivo, «está garantizado en la Ley andaluza de Igualdad», en concreto en el artículo 9.1, que dice textualmente: «Las Administraciones públicas de Andalucía garantizarán un uso no sexista del lenguaje y un tratamiento igualitario en los contenidos e imágenes que utilicen en el desarrollo de sus políticas, en todos los documentos, titulaciones académicas y soportes que produzcan directamente o bien a través de personas o entidades. Todas las publicaciones y emisiones en las que la Junta de Andalucía participe garantizarán un tratamiento inclusivo y no discriminatorio de las mujeres».
En su denuncia ante lo injusto de la propuesta de Vox, Naranjo insistió en que “el lenguaje inclusivo no solo es un mandato legal en Andalucia sino también a nivel estatal en la Ley de Igualdad, también de 2007, donde uno de los criterios generales de actuación de los poderes públicos es «la implantación de un lenguaje no sexista en el ámbito administrativo y su fomento en la totalidad de las relaciones sociales, culturales y artísticas», según el artículo 14.11.
Las diputadas insistieron en el flagrante incumplimiento de las leyes que supone abandonar el lenguaje inclusivo regulado además en los usos de la Administración pública andaluza desde el año 92. También este paso atrás vulnera una resolución aprobada por el Parlamento Europeo en 2008 en la que se reconoce que “un lenguaje neutral tiene más posibilidades de ser aceptado por los usuarios si es natural y discreto. Deben buscarse alternativas neutrales e inclusivas genuinas en lugar de expresiones que se presten a controversia».
Las voces de protesta ante esta medida parlamentaria por parte de los grupos de mujeres han empezado a sonar con fuerza. Según Fórum de Política Feminista, se trata de un “grave atentado del gobierno andaluz contra las mujeres”. En un comunicado hecho público este grupo afirma que el lenguaje inclusivo es necesario para reconocer que las mujeres existen, y “señalarlas por su género”. Tiene una finalidad también “garantista” y es una “herramienta indispensable para señalar la visibilidad de las mujeres”.
“Estamos -dice el comunicado- ante una voluntad manifiesta de una derecha extrema y de un gobierno que usa a las mujeres como moneda de cambio para pactar su estabilidad y dar una vuelta de tuerca hacia un pasado profundamente discriminatorio, utilizando el lenguaje masculino para señalar la superioridad del varón”.
Fórum de Política feminista llama al movimiento feminista y al conjunto de la sociedad a parar este retroceso abocado a desmontar las leyes de igualdad, el lenguaje inclusivo y la propia democracia andaluza”.
M. del S.
(1/6/2021)