MUJERES PODEROSAS QUE ROMPÍAN SU ROL SUMISO
Por Macarena Carvajal
ECOS DEL WIBERMACHT EN LA COLECCIÓN MARIANO MORET
La exposición reúne medio centenar de grabados en los cuales se advierte un intento de los hombres por comprender el enigma que las mujere , tan cercanas pero tan distantes y distintas, representaban en la época del renacimiento y del Barroco.
Para entender esta exposición de pequeños grabados, a veces difíciles de ver por su tamaño, hay que remontarse a la Edad Media y al área germánica del norte de Europa. En aquella época, el llamado poder de las mujeres, el Weibermacht, mostraba a determinados héroes de la mitología y de la antigüedad bíblica, sucumbiendo ante mujeres poderosas que los dominaron y los ridiculizaron.
Llegar a estas representaciones fue debido en gran parte al debate surgido a finales de la Edad Media y en el Renacimiento, debate literario en su mayor parte, sobre la naturaleza de hombres y mujeres y cuáles debían ser las normas que regularan esta relación. La aparición de una serie de textos apologéticos que ensalzaban a las mujeres en la antigüedad, reivindicando la valentía, la astucia para conseguir sus objetivos, la inteligencia femenina para resolver problemas, ensalzando, en definitiva , a la mujeres poderosas que rompían el corsé de su rol sumiso y bondadoso, trajo inmediatamente la reacción contraria es decir, la mujer es peligrosa, hay que tenerle miedo porque su naturaleza es astuta y malvada y su intención es destruir la jerarquía patriarcal. Y esto no se podía consentir.
En este contexto se inscriben los grabados que presenta la exposición de Bellas Artes. En las obras de autores como Lucas van Leyden, Sebal Beham, o Georg Pencz, se puede descubrir el nivel de temor de los hombres de la época ante la fuerza de las mujeres. Por ello las intentan ridiculizar o denigrar en muchos casos, a través de los grabados.
Sin embargo, cuando vemos el panorama en su conjunto, lo que están demostrando es el miedo, la incertidumbre ,el desconocimiento y el pavor que provocaban en los hombres esas mujeres tan arriesgadas y poderosas.
Algunas de las historias que representan los grabados son: Judith y Holofernes. Este episodio bíblico,muy utilizado en el arte cristiano, cuenta cómo el general asirio Holofernes que estaba locamente enamorado de la bella Judith y estaba a punto de destruir la ciudad de Betulia, es decapitado por ella aprovechándose de que estaba borracho. Con ello, Judith libró a su ciudad de una invasión espantosa. El grabado nos quiere mostrar un ejemplo de mujer poderosa que obtiene su objetivo utilizando sus armas de mujer. Sin embargo otras representaciones de este tema, por ejemplo el maravilloso óleo de la pintora de esa misma época Artemisa Gentilleschi, nos introduce con una perspectiva de género, en otro contexto en el cual, Judith que fue objeto de maltrato, violencia e injusticia toma venganza con la decapitacion de su agresor.
Varios grabados representan a Salomé con la cabeza de Juan el Bautista. En el reinado de Herodes muchos profetas, entre ellos Juan el Bautista, abominaban del rey y de su esposa profiriendo insultos y lanzando violentas diatribas contra el poder, lo que amenazaba el orden establecido. Juan fue arrestado y declarado culpable. En el cumpleaños del rey la hija de su esposa, Salomé, que probablemente sólo tendría 11 o 12 años, bailó para Herodes y a este le gustó tanto que le ofreció lo que la niña quisiera por su danza. Salomé pidió la cabeza del Bautista.
Esta historia, contada mil veces, representada de todas las formas posibles, experimenta una metamorfosis con el paso del tiempo. Tres siglos después Salomé, por arte de los escritos de San Agustín, se convirtió en arquetipo femenino, apareciendo como una desvergonzada que bailó de forma erótica y luciendo su cuerpo casi desnudo, encarnando así el peligro femenino frente al cual los hombres deben protegerse.
Macarena Carvajal es historiadora y escritora.
Exposición: «El poder de las mujeres. Ecos del Weibermacht en la Colección Mariano Moret» en el Museo de Bellas Artes de Sevilla.
Dónde: Museo de Bellas Artes de Sevilla.
Dirección: plaza del Museo, 9.
Cuándo: del miércoles 17 de mayo al domingo 17 de septiembre de 2023.
Horario: de martes a sábado de 9 a 21 horas, domingos y festivos abiertos de 9 a 15 horas y lunes cerrado (excepto lunes víspera de festivo de 9 a 15 horas). Agosto: de martes a domingo y festivos abiertos de 9 a 15 horas y lunes cerrado (excepto lunes víspera de festivo de 9 a 15 horas).
Precio: entrada gratuita para ciudadanos de la Unión Europea y miembros del ICOM, resto de países entrada a 1,5 euros.