Y no es un farol. Pueden creerlo. Es una verdadera isla virgen imposible de concebir a escasas millas de distancia de ciudades tan bulliciosas y superpobladas en época estival como Olhao, Faro o Portimao.
Lo mismo que cantaba de Cuba y Puerto Rico Pablo Milanés, se podría decir que Farol y Culatra son de un pájaro las dos alas. Farol al oeste, Culatra al este. Las dos formaban parte de la Isla de Barreta, o isla Deserta, la gran isla del Cabo de Santa María que se abrió en canal en el siglo XIX para que los barcos pudiesen llegar a los puertos de Olhão y Faro. El gran faro, símbolo de la isla y que le da nombre, se levantó entonces para guiar a las embarcaciones.
Texto: Serena Lagos
Fotos: Ana Balbontín