A LAS MUJERES EN EL PERIODISMO NOS QUEDA MUCHÍSIMO POR HACER. TENEMOS UN TECHO DE CRISTAL MUY RESISTENTE
. Ha recibido la Medalla de la Ciudad por su labor docente, educativa e investigadora.
. “Vine a Sevilla a hacer prácticas en el 77 –dice- y aquí me quedé. Las raíces tiran mucho”.
Desde que recibiera el pasado 30 de mayo la Medalla de la Ciudad de Sevilla, Marta Carrasco se ha visto envuelta en la nube de la fama, un mundo desconocido y desbordante para ella: “Me supera un poco, la verdad. No me esperaba la medalla pero lo que vino después todavía menos”. Cuenta asombrada que, cuando salió de FIBES (lugar de celebración del acto de entrega de condecoraciones), tenía más 170 mensajes de watssaps en su teléfono móvil, que desde entonces la gente la reconoce por la calle, la llaman por su nombre y no paran de felicitarla: “Ahora comprendo mejor a quiénes de la noche a la mañana han salido del anonimato y se han hecho famosas, como Lady Di o la reina Letizia. Tiene que ser brutal. Yo estoy deseando que pase ya la resaca de la medalla y poder guardármela aquí en la intimidad, muy satisfecha, muy honrada y muy feliz”.
Periodista de raza, académica de las Artes Escénicas de España, crítica de danza y de baile flamenco, Marta Carrasco es también colaboradora de ABC de Sevilla en las páginas culturales y responsable de la Oficina de Prensa del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Cuando llegó a Sevilla, la tierra de su madre y de sus abuelos, en el 77 para hacer prácticas en un periódico no pensaba que esta ciudad sería el centro de su vida. “Yo tenía 18 años y Sevilla una vida artística efervescente. No era la movida de Madrid, pero aquí estaba todo más concentrado. En la Sevilla de los 80 se conocía todo el mundo, había grupos de teatro interesantes, yo salía con pintores y artistas… Me gustaba la ciudad, me sentía a gusto pese al calor. Es muy abarcable.”
En el mundo del periodismo Marta ha tocado todos los palos. Lo mismo se empolvaba los pies recorriendo los pueblos con los presidentes de las primeras diputaciones democráticas que asistía a las solemnes sesiones de constitución del Parlamento de Andalucía. Se estaba abriendo un mundo profesional en el que dejar Sevilla no representaba para ella ninguna opción,:
– “Las raíces tiran mucho, dice. Mi familia vivió primero en Barcelona, donde nacimos 4 de las cinco hermanas que somos, y después en Madrid. Pero en mi casa se vivía en andaluz, se comía en andaluz, se cantaba y se bailaban sevillanas. Sentíamos la alegría de Andalucía”.
EN SEVILLA HAY ACTIVIDAD CULTURAL
Aquí se Sevilla no tardó en trazar su rumbo informativo sin dejar que se alterase por tentaciones políticas o administrativas. Compaginó su trabajo con su propia formación en danza, baile e investigación cultural en los Estados Unidos y otros países extranjeros, al tiempo que desarrollaba una intensa actividad como reportera en ese campo y, especialmente, durante la Expo del 92. Ese período supuso para ella un paso decisivo en su trayectoria comunicativa, pues la llevaría a especializarse en la información y la crítica artística, materias que más la motivaban y que reforzaban además su independencia como periodista.
– ¿Conserva Sevilla actualmente algo de aquella efervescencia de los años 80, ha decaído la euforia cultural o se mantiene?
– “La eclosión de los 80 fue maravillosa -dice Marta Carrasco- porque se partía de unos niveles muy bajos. Pero después la Expo nos ha dejado una infraestructura cultural en teatros, museos, música… que nos permite que ahora estar muchísimo mejor. Lo que pasa es que antes había tan poco, que cualquier iniciativa se notaba mucho. Es cierto que falta mucho apoyo y que se han quedado muchos eventos culturales en el camino como el Festival de Jazz, o el Festival de Música de Cine, pero se han mantenido la Bienal de Flamenco, el Festival de Danza de Itálica, el Festival de Música Antigua y han nacido otros. La crisis ha afectado sobre todo a las galerías, porque han cerrado muchas. Sin embargo, yo creo que hay actividad cultural en Sevilla para quien quiera encontrarla”.
LAS MUJERES TIENEN AÚN MUY POCA PRESENCIA EN LA CULTURA
Está convencida de que Sevilla volverá a recuperar su compás cultural en cuanto pase la pandemia. Asegura que los teatros de la ciudad tienen un gran nivel, “el Central, dice, es de los mejores de España en programación de Danza con temporánea, el Maestranza trae las mejores compañías de ópera y el Lope de Vega parece que vuelve a resurgir con la nueva dirección.”
– ¿Y la presencia de las mujeres en los diferentes ámbitos culturales sigue el mismo ritmo o parece estancada?
“Todavía tenemos un techo de cristal. Por ejemplo, en los museos españoles sólo el 15% de las colecciones pertenecen a mujeres. En los repertorios de las compañías nacionales puedo citar el Ballet Nacional de España que, por cada diez coreógrafas tiene más del doble de coreógrafos, y en la Compañía Nacional de Danza pasa exactamente igual”.
Pero las cosas se pueden hacer de otra manera. Marta se refiere a la gestión del CAAC que, desde hace diez años, tiene una programación paritaria: “Eso significa que hay mujeres muy válidas y el mundo cultural tendría que prestar más atención a este caso”.
«Los techos de cristal están todavía ahí, dice esta periodista curtida en la crítica, “no como antes, porque la sociedad avanza, pero tendríamos que coger un poco más de velocidad”. A la cabeza se le viene un ejemplo claro del camino que queda por recorrer: “Hace unos días -dice- la Diputación de Sevilla entregó las Medallas de la Provincia y no se la dio a ninguna mujer. Yo no me puedo creer – añade- que no haya una sola mujer en esta provincia que no sea merecedora de una medalla. No me lo puedo creer”, insiste.
– ¿Y en el mundo del periodismo cómo son los techos de cristal?
– “Muy, pero que muy duros. Queda mucho por hacer. Las redacciones están llenas de mujeres y, sin embargo, los puestos directivos siguen ocupados por los hombres. Eso pasa en Andalucía y en toda España.”
DISFRUTA DEL PERIODISMO
En sus ratos libres Marta Carrasco investiga sobre danza, forma parte de jurados artísticos, imparte cursos y ponencias sobre el baile y escribe. Ha publicado tres libros propios y en colaboración varios sobre la historia del baile y del Flamenco. Ahora prepara una biografía sobre Luísa Triana (Sevilla, 1933, bailaora, actriz y pintora), participa en la organización del centenario de Antonio el Bailarín, es miembro de la asociación cívica Civisur y del colectivo “Mas Mujeres”.
Marta carrasco no se aburre. Disfruta de su oficio todo lo que puede: “El periodismo, cuando es vocacional, lo disfrutas muchísimo, puede resultar fascinante. Yo me siento privilegiada cuando me llaman los coreógrafos para una audición. Me encanta. Hay momentos en este trabajo que no cambiaría por nada como cenar con Carmen Laffón, pasear por la Alhambra con Carlos Cano y con el pintor Manuel Rivera, almorzar con Luís Gordillo o pasear en coche de caballos con Borges… este oficio tiene muchas miserias, pero también te brinda cosas que no le pasan a cualquiera.”
Nani Carvajal
10/6/2021