OTRA AGRESIÓN MACHISTA EN GRANADA Y LA MUERTE POR VIOLENCIA VICARIA DE UN NIÑO EN PAMPLONA, SE SUMAN AHORA AL RECIENTE ASESINATO DE CAROLINA, EN GETAFE
No hay alto el fuego, ni siquiera tregua humanitaria. No habrá paz para las mujeres mientras la sociedad mantenga su silencio cómplice interrumpido apenas débilmente por localizados minutos de silencio o minoritarias concentraciones de condena cada vez que se producen agresiones machistas. Cuando aún sufríamos en caliente el duelo por Carolina, asesinada por su pareja en Getafe, el domingo pasado, esta vez en Armilla (Granada), en Granada se producía una agresión similar aunque afortunadamente y en el último momento, la víctima pudo ser rescatada con vida:
EN GRANADA, una mujer de 47 años sigue ingresada en estado crítico en el hospital San Cecilio de la localidad, después de haber sido apuñalada por su ex marido, de 54 años, del que estaba divorciada desde 2005. El agresor que cuenta con antecedentes penales por violencia machista desde 2012, fue inmediatamente detenido y pasará en breve a disposición judicial.
La agresión machista se produjo en el domicilio de la víctima, en Armilla, cuando se encontraba con dos de sus tres hijos. Mientras el chico de 8 años salió a pedir ayuda a los vecinos, la niña, de 14, se mantuvo en el interior de la vivienda intentando frenar la agresión a su madre sufriendo a su vez heridas en una mano al intentar defenderla.
La mujer fue inmediatamente trasladada al hospital por la fuerzas de seguridad y allí se la intervino de urgencia encontrándose actualmente en al UCI.
Armilla ha guardado un minuto de silencio para mostrar su repulsa contra el apuñalamiento de esta vecina a manos de su exmarido. Más de un centenar de personas han participado en la concentración silenciosa convocada por el Ayuntamiento. La alcaldesa, Dolores Cañavate, ha certificado que la mujer llevaba años sufriendo violencia machista, y ha recordado que la mujer agredida había denunciado en el Centro Municipal de Información a la Mujer (CMIM) a su pareja por violencia de género de 2004 a 2010 pero que, desde ese año, no se habían producido ninguna denuncia más salvo en 2015 que realizó consultas por incumplimiento del pago de la pensión alimenticia.
La víctima no es natural de Armilla pero lleva años residiendo allí. Cuando desde 2004 a 2012 fue atendida en el centro municipal de información a la mujer como víctima de violencia machista, fue objeto de medidas como «internamiento en casa de acogida, pisos tuteladas, cambio de provincia tanto de ella como de los niños y órdenes de alejamiento», según la alcaldesa, que ha precisado que el supuesto agresor llegó a ser condenado a seis meses.
La subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López-Calahorro, ha aclarado que desde septiembre de 2012 el caso estaba «inactivo» en el sistema Viogén porque la última valoración, realizada en junio de 2011, determinó que el riesgo era «inapreciable», de ahí que la mujer no tuviera actualmente protección. Por ello, ha hecho un llamamiento a las víctimas para que denuncien en caso de violencia machista y puedan recibir la protección correspondiente.
Cuando vemos las imágenes que nos llegan desde Gaza o Israel las palabras genocidio, masacre, catástrofe humanitaria… salen de nuestros labios de forma natural y singularmente matizadas. Es la calificación que nos merecen las miles de víctimas, especialmente mujeres, niños y población civil en general, de la guerra de Israel -Hamás y lo mismo podríamos decir de la de Ucrania.
La violencia machista contra las mujeres, niños y niñas arrojan cifras si no similares, al menos muy cercanas a las que se contabilizan en períodos de guerra, con la diferencia de que su acontecer se produce minuto a minuto, día a día, semana tras semana y año tras año… en todo el mundo pero se recogen sólo en aquellos escasos países donde se utilizan las estadísticas.
A las cifras españolas nos remitimos desde que en 2003 se establecieron las estadísticas:
MUJERES VÍCTIMAS MORTALES
- 1.237 muertes desde el 1 de enero de 2003 hasta el día de hoy.
- 2023: 52 (De 1 de enero hasta el día de hoy).
MENORES VÍCTIMAS MORTALES
- 49 asesinatos desde el 1 de enero de 2013 hasta el día de hoy.
- 2023: 1 (De 1 de enero hasta el día de hoy).
HUÉRFANOS Y HUÉRFANAS MENORES DE EDAD
- 428 huérfanos desde el 1 de enero de 2013 hasta el día de hoy.
- 2023: 51 (De 1 de enero hasta el día de hoy).
DENUNCIAS DE AGRESIONES RECIBIDAS
- 2.099.932 denuncias desde el 1 de enero de 2009 hasta el 31 de marzo de 2023.
- 2023: 46.327 (De 1 de enero al 31 de marzo)
Y esto sólo aquí, en nuestro país y en relación con los feminicidios. Añadan otros tipos de violencia contra las mujeres tan inconmensurables como generalizadas en cualquier rincón del planeta:
- La trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual.
- La mutilación genital femenina.
- La violencia vicaria.
Si seguimos sumando lo que ocurre y no se contabiliza pero que conforma la cruel realidad de las agresiones a mujeres y a menores ¿De qué estaríamos hablando?
Pues todavía, a día de hoy, hasta la intelectualidad más acreditada se lleva las manos a la cabeza cuando las feministas calificamos este ensañamiento de género como de «terrorismo machista» y, ¿por qué no?, de una vez por todas de «masacre» o «genocidio».
VIOLENCIA VICARIA: El segundo caso de violencia vicaria del año en España acabamos de sufrirlo en la sierra de Urbasa, en Pamplona, donde Txetxo Apestegui se tiró al vacío abrazando a su hijo Mateo, de 7 años, para causar el peor daño posible a la madre del pequeño. Ambos fueron encontrados muertos en la base del barranco conocido como Balcón de Pilatos.
Las localidades de Estella e Igúzquiza, donde respectivamente vive la madre y residía el padre, están consternadas y ambas han decretado tres días de luto oficial. La madre del niño denunció el lunes su desaparición ante la Guardia Civil después de ir a recogerlo al colegio, después de pasar el fin de semana con el padre, y allí le dijeron que no se había presentado. El caso se investiga como posible violencia vicaria. Los padres del niños estaban separados. El caso está bajo secreto del sumario y no se ha aclarado si existían denuncias previas entre los progenitores.
De confirmarse la naturaleza machista de este crimen, sería el segundo menor asesinado por violencia vicaria en 2023 y el número 50 desde que comenzaron a elaborarse las estadísticas en 2013, el primero en Navarra. En enero, India, de 8 años, y su madre Paloma, fueron asesinadas en Valladolid por la pareja de esta.
¿Cuántas mujeres y menores tienen que seguir muriendo, sufriendo y soportando vejaciones para que la sociedad se eche la calle en masa y diga BASTA YA, como cuando ETA? ¿Cuándo pararemos con la unidad este terrorismo machista, esta masacre de mujeres y este genocidio de madres y menores que sólo en nuestra país supera ya en 500 a las víctimas de la violencia político nacionalista que sufrimos durante 60 años y dejó 1451 víctimas? ¿Cuándo NOS QUEREMOS VIVAS, NI UNA MENOS, – y con nuestros hijos e hijas- sea un lema que movilice a las millones de personas que rechazan la violencia contra las mujeres? ¿Habrá que esperar de nuevo al 25N, o al 8M para ver una protesta callejera multitudinaria, en la suposición, claro, de que el feminismo también acuda unido? ¿Hasta cuándo seguirá la voz de las mujeres clamando en el desierto frente al todopoderoso y agresor machismo disfrazado de moderno y solidario?
Sara Lagos