LEYA DE LA PARIDAD: A LA 2ª VA LA VENCIDA
Por Carmen Rocío Vázquez
.- El Proyecto de Ley de Representación Paritaria, aprobado de nuevo por el Consejo de Ministros es una «declaración de intenciones» del actual Gobierno, según la ministra de Igualdad, Ana Redondo, que también ve una forma de acabar con los «techos de cristal».
.-Ha sido el primer proyecto de Ley aprobado por el actual Consejo de Ministros, aunque ya se aprobó el pasado mes de marzo por el gobierno anterior.
.-Obliga a que haya al menos un 40% de representación femenina en el Gobierno, en los consejos de administración de las grandes empresas, en las candidaturas electorales y en los organismos constitucionales.
Uno de los compromiso de este recién estrenado Gobierno con la mujer ha quedado materializado en la reciente aprobación por el Consejo de Ministros de la llamada «Ley de la Paridad». Un compromiso legislativo que en algunos de sus aspectos ya se viene aplicando desde años en nuestro país y que está impulsado por la Unión Europea con el objetivo de que la paridad administrativa sea real en todo el territorio comunitario a partir del 2026.
El Proyecto de Ley de Representación Paritaria, que se intentó aprobar definitivamente el pasado mes de mayo en el Congreso pero tuvo que ser postergado por el adelanto electoral, establece que, al menos, haya un 40% de representación femenina en el Gobierno, en los consejos de administración de las grandes empresas, en las candidaturas electorales y en los organismos constitucionales.
LISTAS CREMALLERAS
En lo político, el objetivo principal es establecer que las candidaturas que se presenten a cualquier elección estén integradas por personas de ambos sexos, ordenadas de forma alternativa – lo que se conoce como listas cremalleras que ya se vienen aplicando en numerosas candidaturas electorales- en las elecciones a miembro del Congreso, Senado, Parlamento europeo, asambleas autonómicas, municipios, consejos insulares y cabildos insulares. «La meritocracia sin paridad no es posible”, advierte la ministra de Igualdad, Ana Redondo, para quien esta norma, al primera que se aprueba en la legislatura que acaba de comenzar, es “motivo de esperanza”. Lo mismo piensa el presidente, Pedro Sánchez, al referirse al momento de su aprobación:
“Lo hacemos en un momento especialmente duro y oscuro, con 55 mujeres asesinadas por violencia de género”.
En lo que afecta a las administraciones públicas, la Ley de la Paridad atañe a los órganos del Tribunal Constitucional, del Tribunal de Cuentas o del Consejo General del Poder Judicial. En su tramitación anterior este último organismo, en un extenso informe advirtió de que «la norma es excesiva», tiene «difícil aplicación» y «puede lastrar los principios de mérito y capacidad».
También obliga la Ley a la paridad de ministras y ministros, es decir, que cada uno de los sexos esté representado como mínimo en un 40% del total con independencia del partido que gobierne. Actualmente el gobierno está compuesto por 12 ministras y 10 ministros.
La normativa sobre la necesaria paridad entre hombres y mujeres en todos los organismos públicos y en los consejos de administración privados está vigente ya en la leyes de la UE, según el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), que constituye uno de los principales «europrincipios» en materia de política social y empleo, y por lo tanto, son de cumplimiento obligatorio para los Estados miembros.
LAS EMPRESAS PRIVADAS TENDRÁN TAMBIÉN QUE APLICARLA
La gran novedad se encuentra en la esfera privada: Las entidades cotizadas deberán asegurar que sus consejos de administración al menos tengan un 40% de consejeros del sexo menos representado antes del 1 de julio de 2024”. En el caso de los puestos directivos, la empresa deberá rendir cuentas si se producen incumplimientos, establecer protocolos y revisar sus procesos para garantizar que se aplique la Ley.
Los organismos encargados de velar por el cumplimiento de las obligaciones de representación paritaria en sociedades cotizadas y entidades de interés público serán la CNMV y el Instituto de las Mujeres, respectivamente. En todos ellos se obligará a que haya una presencia de al menos el 40% de mujeres. La Comisión Nacional del Mercado de Valores podrá suspender la cotización de las empresas en caso de rechazo a la norma. Actualmente, la presencia de mujeres entre los miembros de alta dirección se encuentra lejos de rozar ese 40%.
La reforma también se aplicará a los Colegios Profesionales y los Consejos Generales y garantizará que las mujeres desempeñen como mínimo el 40% de los puestos en las juntas de gobierno de estos organismos.
EL DEAMBULAR ELECTORAL DE UNA LEY
Si hay una Ley sometida a los vaivenes electorales esta esta es sin duda la Ley de la Paridad. Reivindicada desde hace décadas por el movimiento feminista y anunciada como proyecto estrella en las últimas legislaturas, lo cierto es que los gobierno sólo encontraban hueco para su tramitación cuando se aproximaba el 8 de Marzo o cuando se preparaba una campaña electoral.
Este mismo año sin ir más lejos, tres días antes del 8-M se anunció su próxima aprobación en Consejo de Ministros. Y efectivamente, el Proyecto de Ley de Representación Paritaria se aprobó en Consejo de Ministros el 23 de marzo de 2023, tal como lo anunció la entonces titular de Economía, Nadia Calviño. En la campaña electoral de las autonómicas del 28-M, el candidato socialista y presidente en funciones, Pedro Sánchez, aseguró que la Ley de la Paridad sería ratificada inmediatamente por las Cortes, pero no pudo ser pues él mismo convocó elecciones para el 23-J y se disolvieron las cámaras.
ESCEPTICISMO FEMINISTA
Desde el feminismo, los vaivenes electorales que ha sufrido esta Ley han hecho aumentar el escepticismo en torno a la misma. En estas mismas páginas de Mujeres del Sur, el 24 de mayo pasado, una reconocida feminista independiente como es Mireya Forell nos hacía estas declaraciones.
-«¡Ojalá que el poder patriarcal dependiera de paridad para desaparecer! No sé mucho de política institucional, pero me parece haber escuchado hace tiempo el deseo de mejorar este proyecto de Ley, y como las derechas no dejan dar un paso sin crear escándalos, a veces se toman las decisiones de aquella manera. Está claro que las vindicaciones feministas están atendidas más por rentabilidad electoral que por profundas motivaciones. Pero lo importante es que por el lado institucional no vayamos para atrás.»
La ministra Ana Redondo, que en este caso ha sido la encargada de presentar la Ley – lo que no ocurrió en marzo pasado con su antecesora en el cargo, Irene Montero, pues entonces como se ha dicho anteriormente fue Nadia Calviño quién se encargó de anunciarla- está convencida de que esta Ley garantiza la igualdad de oportunidades para hombres y mujeres.
Pero además, la ministra Redondo está convencida de que es el camino para «romper los techos de cristal» que siguen frenando las posibilidades profesionales de las mujeres aún mostrando y demostrando sus capacidades y habilidades.
Tanto lo cree, que confía en que el partido popular, -«en el que conozco a muchas mujeres feministas», dice, apoyen el proyecto de Ley en las Cortes donde iniciará en breve su tramitación. En definitiva, parece que esta vez –a la 2ª va la vencida– estaríamos ante un paso más para evitar las zancadillas e injusticias flagrantes que a diario se cometen contra las mujeres en todos los ámbitos.
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